sábado, 19 de diciembre de 2009

No me veo


La noción ya perdida
Del espacio y la forma
Desde lejos me huyes,
Y te acecho a lo lejos.

Si me sangran las dudas
Y el sudor se avinagra,
Huyo raudo hacia páramos
Donde anida el silencio.

Voy y vengo y no evoco
Más calor que tu sombra,
O tu espalda o tus manos
O tu paso o tu aura.

Cuando cierro los ojos
No me veo por dentro,
Sólo azotes de nieve,
Y este tufo a fracaso.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Si, la casualidad.


Sí, la casualidad quiso que un día
se unieran tu mirada y mi mirada,
dejó caer, así, como si nada
tu agua en el calor de mi agonía.

Si no pudo vencernos la entropía,
si el eco de una rosa deshojada
no derramó su tedio. La jugada,
no se debe al azar, es tuya y mía.

Nuestro es el tiempo, amor, nuestra la hazaña,
nuestro el ayer, será nuestro el destino,
sólo un gesto debemos al acaso.

Nuestra es la vida, nuestra la guadaña,
un galardón tan solo lleva el sino:
Puso tu pie en la ruta de mi paso.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Si me abrazas.


No hay mirada más limpia que la tuya,
ni boca más hermosa que tu boca.
Y no hay mano que toque como toca
tu mano, elegante como grulla.

No hay piel más seductora que tu seda,
ni aroma más profundo que tu aroma.
Todo el sabor del mar en ti lo toma
el mar que egoísta y se lo queda.

Niego el dolor y niego la amenaza,
niego el infierno al pecador impío,
y niego el mal, lo niego si me abraza

tu cuerpo de amapola y de rocío,
tu cuerpo de canela y de melaza,
si me abrazas, amor, ya no soy mío.

martes, 15 de diciembre de 2009

Tic - Tac


Hay no sé qué sonido interminable
debajo mismo de las almohadas.

En cada despertar, en las auroras,
en cada flor, en cada beso nuevo.

Lacera, despiadado,
el pétalo y el labio;
la sonrisa y el trino suave
de los pájaros.

Hay no se qué semejanza macabra
entre el tic-tac de los relojes,
y el sonido que hacen,
al cerrar,
las cremalleras.

Significados....


El poema nace bautizado,
crecido, sin rendijas.
Intocable...

Morirá la Poesía
con un último poema
amarillento
sobre la mesa de autopsias.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Si no es tristeza


Igual que el agua fiera del molino
empuja el engranaje y sube y crece,
igual que el tiempo todo lo encanece
y brota en el carbón, lo blanquecino,

ya se acerca la hora y no parece
que tenga vuelta atrás este camino.
Ya se acerca la hora y el destino
la luz del sol apaga y envilece.

Con esta negra nube aqui en mis manos,
con este oscuro humo en la cabeza,
con este opaco velo en la mirada,

se pueblan con inviernos mis veranos,
la nada encuentro donde la belleza,
si no es tristeza ya no siento nada.

Seré nada


"Junto al árbol de la tumba
de su hermana
crecen ya las iniciales de su nombre"

Rafael Adolfo Tellez



Mi tumba será de viento y de nenúfar,
de arena o de marea incontenible,
no habrá sauce que llora mientras caigo,
ni lágrima que cruce por tu herida.

La ceniza que fui vendrás a mi puerta
con el paso cansado y blanquecino,
no habrá flores ni cruz en su mirada,
un hálito de sombra tendrá el tiempo.

Adiós diré, el resto estará dicho,
fuego será mi todo y seré nada.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Explosiva


Amarla era suicida,
me tuve que rendir
y aplacar el deseo.

Era tan explosiva,
que tuve que elegir,
elegir entre huir
o llamar a los geos.

Su boca era veneno
besarla era sufrir
el peor de los males.

Bendito desconsuelo,
de un trago me bebí,
me bebí su elixir
de pecados mortales.

Esparcía su amor por el mundo como la metralla,
de una sola perdí las agallas, la guerra y la fe,
destrozo mi timón y encallé mi velero en la playa
donde viento me trae su aroma a cianuro y café.

Mi carbón, mi diamante,
mi placer, mi dolor,
mi calor, mi asesina.

Mi verdugo, mi amante,
se agazapa el horror
de tu amor hecho rosa
cargada de espinas.

Para huir de su nombre
mis pisadas borré
de su banco de arena,

que no hay hombre más hombre
que es que sabe perder,
y no hay mujer mas mujer
que la que me condena.


Esparcía su amor por el mundo como la metralla,
de una sola perdí las agallas, la guerra y la fe,
destrozo mi timón y encallé mi velero en la playa
donde viento me trae su aroma a cianuro y café.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Regreso a tus confines


Si aparezco una tarde
con los ojos cansados,
oxidados, de tanta
podredumbre en las ramas,
como un halcón errante
prisionero del viento.

Si aparezco una tarde
por tu verja,
de nácar amarillo, quebradizo,
no inspecciones mis redes
en busca del otoño,
no trates de apagar
la llama de mis manos...

Amarillo es el cielo
cuando mis dedos callan,
si el silencio que dejan
hiede a cloro o sulfuro...

No es mi boca quien dice:
-"regreso a tus confines".
Es mi piel la que busca
tu horizonte azulado.

jueves, 10 de diciembre de 2009

El tiempo


Es tan absurdo el reloj,
tan irritantemente inútil...

¿cómo alcular un infinito
que nunca fue,
que nunca hizo ademán
de sonreirnos?

El tiempo,
¿saben?

El tiempo es el cordón
umbilical de lo impensable;
la paradoja suprema,
el tercer ojo de un dios
que nunca estuvo.

Sobre el humo volátil


Sobre el humo volátil, en mis labios de espuma
se cierne silenciosa la sombra, ah! espejismo.
Vivo para los márgenes, para la luz de otoño,
amarillas las nube en el tiempo infinito.

El eco de tu ausencia, la crudeza del aire,
el cristal que se quiebra, los rayos indecisos,
parecen ruines manos que se emboscan furtivas,
en cada hueso etéreo como huéspedes ínfimos.

Sucede que los trenes se alejan a su hora
y sucede que el tiempo, (ese eterno enemigo)
resquebraja las hojas, las pieles, los jadeos,
los besos, las distancias, con su aliento amarillo.

El dia que a mis ojos retornen los augurios,
y este dolor eterno amanezca aturdido,
la sombra será estrella refulgente de almíbares,
mi cuerpo azul, aurora; tu cuerpo: el cuerpo mío.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Acaba con mi vida



Acaba con mi vida y mis despojos,
destruye mi razón y mi sentido,
ahoga en un segundo mi latido,
arráncame las manos y los ojos.

Igual que lucha el ciervo cuando herido
refugia su dolor en los abrojos,
refugio mi dolor en los rastrojos
que hiciste del vergel que siempre he sido.

Incéndiame la carne ya marchita
en una fulgurante y cruenta hoguera
que alumbre como alumbran cien mil teas.

Extíngueme la luz, escupe, grita.
Mas cuando nada quede de lo que era,
no olvides olvidar que me deseas.

Inútil poesía


Son inútiles estas reflexiones
Sobre el mar o la luna o los paisajes.

Son en vano las palabras dadas,
Como brisa contra el mastodonte.

Son vacías, huecas, sin sentido
Libres están, en fin, de ocupaciones.

Pero… y ¿qué? siento, luego escribo.
Esto es quien soy, sonidos y sudores.

Ha llegado la hora


Ha llegado la hora de las azaleas,
La hora de guardarse la ponzoña
Como quien silencia un prodigio.

Ha llegado la hora del letargo,
Del soporífero andar a tientas
De los clarividentes.

Ha llegado el momento
De volver a decir lo que decíamos
De volver a venerar a falsos ídolos,
De barro ya raído y ceniciento.

Ha llegado la hora de las páginas
Y de los abrojos.

La hora de legitimar el silencio como excusa.

La hora agonizante de los alfileres.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Allá lejos


Allá, allá lejos,
todo se está derrumbando
en estruendo de látigos,
hay cadáveres sembrados
sobre tierras baldías.

Allá, allá lejos,
hiede a réquiem sin tregua,
y a polvo, y a guijarros,
y a ese vecino excéntrico
del que nada se sabe.

Allá, allá lejos,
solo acecha la náusea
con su abrazo de azufre,
y nos olvida el alba
y todo es cieno y zozobra.

Allá, allá lejos,
hay estrellas fugaces
que cercenan aortas,
hay juguetes de fuego
y de miembros volando.

Allá, allá lejos,
todo se ha vuelto sangre
y carne mutilada,
y aquí todo es rutina
y mirarse al espejo.

viernes, 4 de diciembre de 2009

WARNING


Porque sólo me queda un montón de basura en los bolsillos, un montón de mierda putrefacta, me pregunto qué hacer.

Porque rasgo las vestiduras del cerebro implorando a sangre y gritos por favor, una respuesta.

Porque no me queda un solo soplo de esperanza en la memoria perdida.

Porque las lágrimas agujerean mis pupilas ensangrentadas, crucifico los recuerdos abismales en la cruz bermeja de mis vacilaciones.

Busco la decisión correcta en un estercolero repleto de cadáveres, busco mi esqueleto podrido y solo encuentro huesos en perfecto estado de desesperación.

Me estoy convirtiendo sin saberlo en un adicto a las decepciones.

Me cebo de problemas ajenos y me quedo preñado de consejos nunca dichos, soy una especie de máquina aconsejadora, pero no encuentro salida a mi propio problema inexistente.

Busco mil mentiras permitidas y me atraganto de reproches.

Oigo canciones protesta, inútiles a mis oídos, sordos de angustia, sordos de desuso.

El dolor martillea mi cuerpo y observo mis miembros tullidos, ayer frondosos, observo mil brazos y mil piernas que me faltan.

Amontono mis despojos en el mismo agujero, en la misma fosa común en la que en ocasiones, vomito lo que no he consumido.

Me desembarazo de vientos agotados, asesino insectos, a su vez, asesinos de palabras, ensangrento mis dedos y sólo consigo manchar de porquería todo lo que toco.

Destruyo lo que miro con la simple mirada, incendio iglesias por el mero hecho, violo niñas en los confesionarios, atropello ancianas e impregno de sangre la pintura gris, metalizada, de mi flamante coche a todo lujo, guardo mil pistolas en el salpicadero, y disparo a bocajarro a quien se cruza en mi desviado camino.

He corrompido las brújulas de mis compañeros y lo he hecho perderse en el maremágnum de mis mediocridades.

Absolutamente nadie sabe qué me pasa, porque la verdad es que no me pasa nada.

No voy con un cartel:

"CUIDADO, QUE ASESINO"

Pero se me ven las intenciones desde lejos.

Temo morir sin concederme el perdón que yo mismo me ofrezco, porque sé que mi condena te arrastraría a ti hacia el abismo, y eso, aunque no lo creas, iría en contra de mis principios.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Lentamente


Lentamente, muy lentamente, me decía…

Como un inmenso continente que se eleva,
Como un arroyo de magma en el océano,
Como el último estertor, de un reloj que se quiebra,
Como una flor de agua, que brota y que rezuma.

Lentamente, por favor, muy lentamente,
Como una despedida ante el espejo.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Volverás


Volverás cuando todo haya pasado
Y el agua haya tornado a su rivera,
E invierno haya dejado a primavera
Libre el camino, en el ayer vedado.

Volverás por la misma carretera
En que pusiste rumbo a lo olvidado
Regresarás y encontraras cerrado
El mismo corazón que hoy te espera.

No lloverán en tu retorno flores
No te recibiré abiertos los brazos.
Echémosle los perros al orgullo.

No volverán placeres y clamores,
Ni sueños por el mar de los sargazos.
Sólo el dolor, porque el dolor es tuyo.

martes, 1 de diciembre de 2009

Searching...


Rasgar las vestiduras, taladrarme,
despedazar mi cuerpo. Piel y huesos.
Arrancarme ls ojos y lo sesos,
debaratar mi pecho, fusilarme.

Incendiarme por dentro, calcinarme,
dejar correr mi sangre y mis humores,
sajar mi corazon y mis dolores,
mis miembros cercenar, aniquilarme.

Vaciar cualquier asomo de sentido:
olfato, gusto, oído, vista, tacto,
emborronar lo que soy y masacrarme.

quemar todo resquicio de latido
sesgar este silencio putrefacto,
revolver mi interior hasta encontrarme.

Tarde


Tarde, mal y tarde, he comprendido
El súbito jadeo de los piélagos,
El hálito sublime de los náufragos
Y sus ensoñaciones.

Tarde, mal y tarde, he comprendido.

Pero no demasiado.