Por no ser una sombra en el espejo
tomé prestado un rol que no era mío.
Ahora este siniestro escalofrío
es dueño del dolor de mi pellejo.
Por no ser solo la caricatura
del hombre que seré cuando sea un hombre
para elevar el eco de mi nombre
habito en un rincón de la impostura.
Y no hay mayor tristeza amigo mío
que ser un monigote, un espejismo
un Don Nadie aferrándose a su trono.
Y ahora, sumergido en este hastío
entiendo que a las puertas del abismo
me asomo cada vez que me traiciono.
Si tú eres una sombra en el espejo
ResponderEliminaryo soy menos que nada bajo cero,
Yo imito y me disfrazo, aunque exonero,
al hombre que no fui cuando era viejo.
Si no quieres ser sombra, te aconsejo
el no escuchar jamás al consejero,
mas si eres ya una somba, solo quiero,
Ser sombra de tu sombra en un reflejo.
Y si sientes que todo te ensombrece
que vives encerrado en martes trece,
enfréntate a los perros del pasado.
Tú tienes el poder, tienes la llave,
tan solo el escritor valiente sabe
matar al personaje que ha creado.