miércoles, 9 de enero de 2013

Perdona esta disculpa


Perdona esta disculpa; va, como siempre, tarde;
conoces mi tendencia a no mirar atrás,
ya sabes que si cuelgo el traje de cobarde

beso por donde pisas y voy por donde vas.

Las flores que envié te producen alergia,
se perdió en el correo la carta que escribí,
tu puesto en mi yo: misteriosa sinergia
leve como el zumbido de un débil colibrí.

Perdona la escenita de la paja en tu ojo
en mi ojo, la viga, no me dejaba ver,
cuando caigo en la cuenta de mi error me recojo

y recojo las migas de la cena de ayer.
Perdona esta disculpa, descorre los cerrojos
va, como siempre tarde, abre, va a amanecer.


1 comentario:

  1. Ahora sí lo has conseguido...Has conseguido la magia drexleriana... la magia de la hermosura de lo liviano

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