La tabla que Medeleiev urdiera,
periódica y repleta de elementos,
llenó mi juventud con sus tormentos.
¡Quién pudiera volver!, ¡Ay, quién pudiera!
Lantánidos, metales, tierras raras,
valencias, peso atómico, alcalinos,
actínidos, halógenos salinos…
¡Quién pudiera volver!¡Quién regresara!
Helio, neón, argón, kriptón, xenón,
que recuerde sólo falta el Radón,
está la lista de los gases nobles.
Otra sería mi vida, la verdad,
Gustándome esta ciencia la mitad,
pero logrando comprenderla el doble.
La química es malvada, me da flato
ResponderEliminardolores de cabeza... ¿Y mi aspirina?
El ácido acetil con arginina
que calma mi pesar bronco y bravato.
Sulfuro de Carbono, perborato,
Nitrito de potasio, pentamina,
arsénico y radón con vitamina,
chupitos del lunático insensato.
La química es un pub con barra libre,
igual mezcla Cobalto con Tecnecio
que Vodka con Tequila y con Cardhu.
Con cocktails de esa química y calibre,
me siento cada vez algo más necio
de no saber ni papa, no sé tú.